Cada año mueren más de 100 mil niños en accidentes de tránsito en el mundo

Durante el año 2019 murieron en México 783 niños menores de 14 años en algún accidente de tránsito, es decir, 2 niños cada 24 horas. En el mundo, cada año mueren más de 186 mil 300 niños en siniestros de tránsito, es decir, más de 500 niños por día. De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS).

El Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) registra que en América Latina cada media hora muere un niño víctima de un siniestro vial.

En México, de acuerdo con la Información de Decesos por Siniestros de Tránsito (Inegi, 2020), durante el año 2019 murieron 783 niños menores de 14 años en algún accidente de tránsito, es decir, 2 niños cada 24 horas.

No obstante, aunque el uso correcto de un Sistema de Retención Infantil (SRI) o silla de bebé podría ser crucial para salvar vidas en caso de un accidente de tránsito, en México solo el 16% de los niños menores de 12 años viajan en uno. Además, según la experiencia de los técnicos expertos, la mayoría de estos sistemas están mal instalados.

Es importante destacar que las sillas de seguridad infantil para vehículos tienen una fecha de vencimiento. Esto se debe a que, con el tiempo y las variaciones extremas de temperatura a las que están expuestas al permanecer dentro del vehículo, estas sillas pueden perder o reducir sus propiedades mecánicas. Aspectos como el límite elástico, la tensión de ruptura, la dureza y la resistencia al impacto son características cruciales que pueden ser vitales en caso de un accidente. Sin embargo, su deterioro compromete su eficacia para proteger a un bebé.

¿Dónde revisar la caducidad de la silla de bebé?
 

Esto dependerá de la marca, por ejemplo:

• Evenflo: tiene una etiqueta con la fecha de fabricación (DOM).
• Chicco: señala la fecha de vencimiento en el asiento y la base.
• Britax: indica la fecha de fabricación, pero deberás revisar el manual para saber el tiempo de vida.
• Graco: muestra la fecha de vencimiento en el respaldo del asiento o en la parte lateral.

Otro factor relevante es la velocidad:

• Existe una relación directa entre el aumento de la velocidad media y la probabilidad de que ocurra una colisión, así como con la gravedad de sus consecuencias. Por ejemplo, por cada aumento del 1% en la velocidad media, el riesgo de que se produzca una colisión mortal se incrementa en un 4%, y el de colisión grave, en un 3%.
• El riesgo de muerte para los peatones atropellados frontalmente por un automóvil se dispara (por ejemplo, si pasamos de 50 km/h a 65 km/h, este riesgo es 4,5 veces superior).
• En los impactos laterales entre automóviles que circulan a 65 km/h, el riesgo de mortalidad para los ocupantes es del 85%.

Debido a las cifras alarmantes y consientes de la necesidad de crear herramientas de información acerca de la importancia de que los niños viajen más seguros en los vehículos, El Poder del Consumidor lanza el video tutorial Seguridad infantil en el auto: la importancia de los Sistemas de Retención Infantil para la selección y uso correcto de un Sistema de Retención Infantil o sillita de bebé.

¿Qué más debemos saber?

1. El cinturón de seguridad no está diseñado para la retención de niños, sino para adultos.

2. La proporción cabeza-cuerpo es mucho mayor cuanto más pequeño es el niño, de ahí que el porcentaje de lesiones en esa parte del cuerpo sea mayor en los niños que en los adultos.

3. En caso de una desaceleración brusca, la mayor proporción de la cabeza del niño con respecto a su cuerpo eleva su centro de gravedad, impulsándolo hacia el frente, mientras el cinturón lo retiene de la cintura. Lo anterior genera una hiperflexión de la columna lumbar y distensión de la columna vertebral.

4. Aun cuando son un poco más altos, pero no alcanzan a poner sus pies en el piso del auto, existe la posibilidad de desplazamiento por debajo del cinturón de seguridad (efecto buzo).

5. El cinturón de seguridad pasa sobre el hombro en adultos mayores, mientras que en los niños más pequeños pasa por la cabeza y cuando son un poco más altos pasa sobre el cuello (línea roja en la imagen). Eso incrementa considerablemente el riesgo de lesión en esas partes del niño.

A 110 KM/H se incrementa 30 veces el peso de un bebé. Un bebé de 5 KG en un instante pasaría a tener un peso de 150 KG debido a la aceleración.

Si el adulto lleva puesto el cinturón, no podrá con la fuerza de inercia y el niño saldrá despedido del vehículo por el parabrisas. Si no lleva puesto el cinturón, lo aplastará contra el tablero del vehículo.

Los niños, hasta los 10 años o 135 centímetros de estatura, deben viajar siempre en un SRI. Lo correcto es que los más pequeños viajen en el sentido contrario de la marcha. El SRI nunca debe ir en el asiento del copiloto, siempre en los asientos traseros y siempre utilizando sistemas homologados y certificados.

Fuentes

• El Poder del consumidor - ORG
• Organización Mundial de la Salud
• Instituto Mexicano del transporte